El aumento del estrés oxidativo y respuestas inflamatorias entre las personas que realizan ejercicio vigoroso, los atletas de élite, o el personal militar se han reportado consistentemente. Además, se sabe que el ejercicio exhaustivo y / o desacostumbrado puede conducir a la fatiga muscular, dolor muscular de aparición retardada (DOMS), y una disminución en el rendimiento. Omega-3 ácidos grasos poliinsaturados han demostrado que disminuye la producción de eicosanoides inflamatorios, citoquinas, y las especies reactivas de oxígeno, que poseen efectos inmunomoduladores para atenuar las enfermedades inflamatorias. Aunque varios estudios han evaluado la eficacia de la suplementación con Omega 3,  en deformabilidad de glóbulos rojos, daño muscular, inflamación y metabolismo durante el ejercicio, sólo unos pocos estudios han evaluado el impacto de la suplementación en el rendimiento del ejercicio. Esta revisión Mil Med. 2014 Nov;179 demuestra que, en la actualidad, no se puede concluir la hipótesis de que la suplementación de omega 3 es eficaz y ergogénica, y que los datos no son concluyentes si la suplementación atenúa eficazmente la respuesta inflamatoria e inmunomodulador para hacer ejercicio. Estudios en humanos futuros deben evaluar la eficacia de la suplementación en agujetas, y el rendimiento del ejercicio posterior, en los atletas de multideporte y personal militar que normalmente participan en más de una sesión de ejercicio por día, usando un diseño de investigación más enfocado que los que han sido utilizado en estudios anteriores.