La Spirulina (Spirulina maxima) es una alga unicelular que tiene forma de espiral (de ahí su nombre), y es de color azul verdoso por la presencia de clorofila que le da el color verde y de ficocianina, pigmento que le da el color azulado. La spirulina es una cianobacteria (bacteria aerobia fotosintética) microscópica y filamentosa que se considera un alimento funcional natural. Tiene una gran tradición de uso como alimento en diversas culturas ya que se encuentra por todo el mundo en aguas interiores y del mar. Ofrece proteínas más digeribles que las de la carne de vacuno, por ejemplo, ya que contiene una sorprendente variedad de elementos nutritivos: vitaminas, minerales, ácidos grasos esenciales, proteínas, ácidos nucleicos (ADN y ARN), clorofila, y una amplia gama de fitoquímicos, pues es una cianobacteria filamentosa, posee diversas actividades biológicas y la importancia nutricional viene debido a la alta concentración de nutrientes naturales, que tienen funciones bio-moduladoras e inmuno-moduladores, para nosotros. Es utilizada por infinidad de atletas, en diferentes objetivos y modalidades deportivas, el ciclismo uno de los más destacados. Diferentes preparaciones de spirulina pueden influir en el sistema inmunológico, aumentar la actividad fagocítica de los macrófagos, estimulando la producción de anticuerpos y citoquinas, aumentar la acumulación de las células NK en el tejido y la activación como la movilización de células T y B. La espirulina también han mostrado para realizar papel regulador en el metabolismo de lípidos e hidratos de carbono mediante la exhibición de la glucosa y el perfil lipídico. Preparaciones de la misma, han mostrado una gran ayuda para ser un gran activo contra varios virus como el virus del herpes, citomegalovirus, virus de la gripe y el VIH. Esto se debe a que la spirulina es capaz de inhibir la carcinogénesis debido a las propiedades antioxidantes que protegen los tejidos, también a reducir la toxicidad de hígado, riñón y testículos.
La investigación científica ha verificado la gran riqueza constitutiva de la espirulina; ya se llevan aislados más de 60 componentes y se presume que la tarea está incompleta. Es una de las fuentes naturales más proteicas; casi el 70% de su peso está constituido por aminoácidos. Su proteína es completa y de alto valor biológico: posee 21 de los 23 aminoácidos (todos los esenciales) en proporción casi ideal, destacándose el triptofano (antidepresivo por excelencia) y la fenilalanina (otorga sensación de saciedad) como los de mayor concentración.
A nivel de lípidos, si bien la espirulina no posee abundancia (llega a un 7%), tiene gran calidad de AGE (ácidos grasos esenciales), los cuales se reparten entre omega 3 y 6, destacándose la presencia de un importante ácido graso activado: el GLA (gamma-linolénico), clave en la síntesis de los eicosanoides benéficos.
La espirulina contiene entre un 15 y un 25% de azúcares, lo cual proporciona energía rápida sin sobrecargar el páncreas ni desencadenar hipoglucemia. Entre estos glúcidos se destaca la presencia de un raro azúcar natural (ramnosa) que favorece el metabolismo de la glucosa y posee un efecto favorable en la diabetes. Diez gramos de esta alga aportan solo 36 calorías, razón por la cual es muy recomendada en dietas de adelgazamiento. En materia vitamínica, la espirulina posee una gran riqueza. Además de vitaminas A (diez veces más concentración que la zanahoria y en la forma segura de betacarotenos), B1, B2, B5, B6, ácido fólico, E y H, se destaca por ser la fuente natural más rica en B12 (pocos gramos cubren las necesidades diarias de dicha vitamina, siendo totalmente asimilable al no haber proceso de cocción). Resulta entonces un complemento ideal en dietas vegetarianas estrictas, donde la ausencia de carne produce carencias en el grupo B. En cuanto a minerales, la espirulina es especialmente rica en hierro altamente asimilable (cinco veces más que el hígado); diez gramos satisfacen las necesidades diarias de un adulto. Pero también contiene calcio, fósforo, magnesio, potasio, manganeso, selenio, cromo, cobre, cinc y germanio, con escasa presencia de sodio. También está bien dotada de clorofila, carotenos, ácidos nucleicos, enzimas y fibra soluble (mucílagos). . Mejora el sistema inmunológico por su alto contenido en antioxidantes (betacaroteno, ficocianina, vitamina E), polisacáridos (Ca-Spirulan) y los aminoácidos alanina y acido pantoténico.
Pero vamos a ir mas allá de lo que algunos expertos pueden saber de esta alga, voy a poner algunos de los estudios mas relevantes sobre el tema…
Un estudio ,Effects of Spirulina platensis on plasma lipoprotein lipase activity in fructose-induced hyperlipidemic rats practicado en (ratas) nos dice que la hiperlipidemia dietética (consiste en la presencia de niveles elevados de los lípidos en la sangre. No puede considerarse una patología sino un desajuste metabólico) causada por dieta alta en fructosa. Pues bien, una ingesta de spirulina mejoró ese desajuste metabólico, acompañado por un aumento significativo en la actividad de la lipasa de lipoproteínas en el plasma.
Otro estudio Antioxidant activity and hepatoprotective effects of whey protein and Spirulina in rats evaluó el efecto antioxidante, la eliminación de los radicales libres, con el concentrado de proteína de suero (WPC) solo o en combinación con Spirulina , para evaluar sus efectos hepatoprotector. El estudio in vitro demostró que WPC y la Spirulina provocarón potentes efectos antioxidantes, eliminación de radicales, y actividades quelantes de metales dependiente de la dosis. El estudio in vivo mostró que ambos agentes tuvierón éxito en la prevención de daño hepático inducido por CCl4. Esta prevención fue más pronunciada en las ratas que recibieron la combinación de WPC y Spirulina.
Sus valores nutricionales por 112 gramos son:
La ESPIRULINA, es un alga declarada por la UNESCO como el alimento del milenio por sus múltiples vitaminas, minerales, micro-nutrientes y macro-nutrientes. La espirulina carece de pared celular (celulosa), por lo que puede ser fácilmente ingerida.
Existen tres especies especialmente útiles como alimento, por sus altas propiedades nutricionales:
– Spirulina Platensis (Arthrospira platensis)
– Spirulina Maxima (Arthrospira maxima)
– Spirulina Fusiformis (Arthrospira fusiformis)
Es recomendado como alimento muy útil frente a la malnutrición infantil por muchos organismos internacionales, y se está potenciando su producción en países de renta baja. Recomiendo el siguiente video que aunque está en inglés contiene información útil.
[youtube https://www.youtube.com/watch?v=p37stTXFMXk]
Video
Como principios activos importantes de la espirulina está el beta-caroteno y la ficocianina C. Ésta última tiene propiedades antioxidantes y depuradora de radicales (alcoxilo, hidroxilo y peroxilo). Reduce la producción de nitrito, suprime la expresión de iNOS, e inhibe la peroxidación lipídica microsomal en el hígado. Inhibe de forma selectiva la ciclooxigenasa 2 (COX-2), reduce la producción de prostaglandina E2 (PGE2) y de citocinas proinflamatorias, como el factor de necrosis tumoral alfa (TNF-alfa). También suprime la activación de factor nuclear Kappa B (NF-kB) mediante el bloqueo de la degradación de IkB, y modula las rutas de algunas MAP-cinasas, como p38, JNK y ERK 1/2.
Así pues, además de su buen perfil para el tratamiento de trastornos por malnutrición, la espirulina se perfila como un alimento importante para el abordaje complementario de patología de base inflamatoria, aunque se requiere un mayor número de ensayos clínicos con diversas patologías para establecer un verdadero valor terapéutico en las mismas.
Seguridad
Se constatado en varios estudios su seguridad desde un punto de vista toxicológico, y no se presenta ningun efecto negativo o nocivo. No obstante, hay que tener en cuenta;
– El mejor momento del día para tomarlo es antes de la comida, con agua.
– No es recomendable tomarla antes o cerca de la hora de dormir, ya que podría producir alteraciones del sueño, a causa de la metabolización de dichos nutrientes.
Preferencia
Como opinión personal la mejor en relación calidad-precio es la de Marcus rohrer:
Referencias
[1] Nutrientes e Inflamación. Capítulo 4. Interacciones generales entre nutrientes y procesos inflamatorios. FUNIBER
