Sabemos que la ingesta de proteínas después del entrenamiento de fuerza incrementa la síntesis de proteínas musculares de manera dosis dependiente. Sin embargo, los mecanismos moleculares de esa relación dosis-dependiente no están claros. Recientemente se han publicado los resultados de un estudio (Kakigi y col, 2014; Eur J Appl Physiol 3-ene) en el que los autores determinaron la respuesta de la mTOR en los músculos implicados en un entrenamiento de fuerza en dependencia a la ingesta de proteínas. La mTOR es una proteína responsable del crecimiento hipertrófico del músculo esquelético, entre otras funciones. Distintos aminoácidos activan la vía celular de señalización de mTOR, siendo la leucina uno de los más activos. En el estudio referido, los sujetos realizaron una sesión de entrenamiento de fuerza y al finalizar consumieron agua, 10 ó 20 g de proteínas de suero. Los resultados mostraron que la ingesta de proteínas al finalizar el entrenamiento activó la vía de señalización de la mTOR de manera dosis dependiente, con una mayor activación con la ingesta de 20 g frente a 10 g de proteínas.

 La ingesta de proteínas después del entrenamiento se ha convertido en una rutina muy extendida. Los fisiólogos del ejercicio y los nutricionistas deportivos deben seguir investigando para mostrarnos la dosis, tipos de proteínas y los tiempos de administración más eficaces.