Se han publicado muchos estudios sobre la compatibilidad del entrenamiento aeróbico y de fuerza, pero son muy escasas las investigaciones realizadas con corredores de elite. Recientemente, un grupo de investigadores españoles han publicado los resultados de un estudio (Sedano y col, 2013; J Strength Cond Res 2-ene) en el que valoraron los efectos del entrenamiento de fuerza en corredores de elite (VO2max > 65 ml/kg/min). Los atletas fueron distribuidos en tres grupos: 1) solo entrenamiento aeróbico (EA), que incluía entrenamiento rutinario de fuerza; 2) entrenamiento de fuerza (EF), que realizaron entrenamiento de fuerza resistencia y pliometría; y 3) Grupo de entrenamiento combinado aeróbico-fuerza (EAF), con cargas del 40%1RM para el entrenamiento de fuerza. Los atletas entrenaron 12 semanas, 8 sesiones a la semana (6 sesiones de resistencia aeróbica y 2 de fuerza). Los resultados mostraron que el entrenamiento combinado de fuerza y resistencia aeróbica mejoró la economía de carrera y la velocidad pico, sin cambios significativos en la respuesta del VO2.

 
Un estudio más, en este caso con atletas de elite, que refuerza la idea de la conveniencia de incluir entrenamiento de fuerza en la programación del entrenamiento de los corredores. Como estructurar ese programa será la clave para que realmente sea eficaz.