La recuperación de muchas de las lesiones sufridas en el entrenamiento deportivo o competición a menudo requiere un extenso período de inmovilización del miembro lesionado (desuso muscular que puede llevar a una atrofia muscular). Tales períodos inducen la pérdida de músculo esquelético y los consiguientes descensos en la salud metabólica y la capacidad funcional, en particular durante las primeras etapas (1-2 semanas) de desuso muscular (anteriormente he hablado sobre ello aqui). El grado de pérdida de músculo durante la lesión influye fuertemente en el nivel y la duración de la rehabilitación necesaria. Actualmente, sin embargo, los esfuerzos para intervenir y atenuar la pérdida de músculo durante las dos primeras semanas de la lesión son mínimos. Mecánicamente, la atrofia muscular por desuso se atribuye principalmente a una disminución en la tasa de síntesis de proteína muscular basal MPS y el desarrollo de resistencia anabólica a la ingesta de alimentos. Es decir, la masa muscular no se degrada porque las celulas musculares necesiten energia para mantenerse , lo degrada cuando NO necesita ese tejido construido. Numerosas vías de degradación se manifiestan independientemente de la ingesta de proteína, lo que se traduce en , que si el cuerpo no recibe un estimulo físico, no hay destrucción y reconstrucción mayor que la anterior. Anteriormente en mi web, hemos visto evidencias claras, sobre la ingesta de creatina puede revertir una posible atrofia muscular, como una ingesta adecuada de proteina, ligeramente alta, Las recomendaciones para ingesta de proteína son 1.2-1.8/kg peso corporal para atletas como aquellos en recuperación.
No obstante , el consumo de proteínas en la dieta es de importancia crítica para estimular las tasas de síntesis de proteínas musculares durante todo el día. Dado que el atleta lesionado reduce en gran medida los niveles de actividad física, el mantenimiento de la masa muscular al tiempo que evita al mismo tiempo las ganancias de la masa grasa puede convertirse en un reto. Sin embargo, la evidencia científica sugiere que el mantenimiento o el aumento de la ingesta diaria de proteínas, centrándose en la cantidad, tipo y momento de la ingestión de proteínas en la dieta a lo largo del día se puede restringir la pérdida de masa muscular y la fuerza durante la recuperación de una lesión. Por otra parte, la estimulación eléctrica neuromuscular se puede aplicar para evocar las contracciones musculares involuntarias y apoyar el mantenimiento de la masa muscular en el deportista lesionado. Aunque se requiere un trabajo más aplicado para traducir los hallazgos de laboratorio directamente al atleta lesionado, se describen en el presente documento Eur J Sport Sci. 2014 Jul las recomendaciones actuales de los profesionales con el objetivo de limitar la pérdida de masa y / o la fuerza muscular después de una lesión en sus atletas.
El entrenamiento de fuerza ya por si solo, aumenta de la síntesis proteica muscular, al igual que consumir proteína también lo hace. por ende combinar ambas seria una estrategia perfecta para el Atleta.
El aumento de la síntesis proteica muscular es mayor si se consume proteína posterior al ejercicio y se declina a las 48h subsiguientes. La degradación proteica post-entreno no vuelve a niveles básicos hasta pasadas 48h, cuando ingerimos alimentos, el resultado es distinto. ¿Por qué es importante conseguir el máximo estrés muscular con ejercicio? Porque a mayor degradación,mayor síntesis de proteínas.
Esto quiere decir, que por muy buena dieta e ingesta proteica que hagamos,la síntesis proteica se maximizará con el entrenamiento, he ahí el problema , es por esto que ocurre una degradación muscular por la inactividad física. En el siguiente estudio (aquí) vemos como la atrofia muscular por desuso del músculo esquelético no es atenuada por la suplementación de proteína en la dieta en hombres mayores y sanos. También podemos observar en la siguiente imagen como varía la síntesis proteica post-entreno con el tiempo,pasadas 48h sigue más elevada que en pre-entreno. Esto quiere decir que pasadas 24h después del entreno, la síntesis proteica es casi el doble que antes de entrenar, es decir, un día sin actividad física.
Situaciones como la recuperación de una lesión o enfermedad someten a menudo a deportistas a períodos de desuso, que conducen a pérdidas considerables de la masa esquelética muscular y, posteriormente, numerosas consecuencias negativas para la salud. Se ha establecido que la falta de uso prolongado (> 10 días) conduce a una disminución en las tasas basales y postprandiales de la síntesis de proteínas musculares, sin un cambio aparente en la degradación de proteínas musculares. Sin embargo, parece haber un aumento rapido y transitorio (1-5 días) en la degradación de proteínas del músculo basal el cual podria contribuir a la atrofia por desuso. Un período de inactividad reduce los requisitos de energía y apetito. En consecuencia de esta disminuición, la ingesta de alimentos generalmente disminuye, resultando en un consumo insuficiente en la dieta por ejemplo de proteínas lo cual dificulta el mantenimiento de la masa muscular. La evidencia sugiere que el mantenimiento de la ingesta de proteínas durante un período de desuso atenúa la atrofia por desuso. Además, la suplementación con proteínas de la dieta y / o aminoácidos esenciales se puede aplicar a una nueva ayuda en la conservación de la masa muscular durante la lesión. También estas estrategias son de particular relevancia para el paciente de edad avanzada con riesgo de desarrollar sarcopenia. Se requiere más trabajo para dilucidar el impacto de la falta de uso en las tasas basales y postprandiales de síntesis de proteínas musculares con la descomposición muscular. Tal información proporcionará nuevas dianas para intervenciones nutricionales para atenuar aún más el músculo atrofia por inactividad física.
Cuadro medíco nutricional adecuado para una recuperación óptima:
Nutrientes Claves para la Recuperación
Ingrediente | Cantidad |
Acido Elcosapentaenoico (EPA) | 376 mg |
Acido Docosa-Hexaenoico (DHA) | 264 mg |
Acido Gamma-Linolénico (GLA) | 672 mg |
Selenio | 100 ug |
Zinc | 15 mg |
Vitamina A | 1 mg |
Vitamina B6 | 2.2 mg |
Vitamina C | 90 mg |
Vitamina E | 15 mg |